¿Qué es el IGV?
El Impuesto General a las Ventas (IGV) es un tributo que grava el consumo de bienes y servicios en el Perú. Se traslada al precio final que paga el consumidor y se recauda a lo largo de la cadena de producción y comercialización. Es un impuesto “plurifásico” y “no acumulativo”: en cada etapa se aplica solo sobre el valor agregado.
Tasa vigente y cómo está compuesta
La carga total es 18%, integrada por 16% de IGV más 2% del Impuesto de Promoción Municipal (IPM). Esta estructura está vigente desde el 1 de marzo de 2011.
¿Quiénes están obligados a declarar y pagar el IGV?
En el Perú, están obligados a declarar y pagar el IGV todas las personas naturales o jurídicas —empresas, negocios y profesionales independientes— que realicen de manera habitual operaciones gravadas. En la práctica, esto significa que si tu actividad implica vender bienes o prestar servicios en el país, construir, importar o realizar la primera venta de un inmueble como constructor, eres contribuyente del IGV y debes presentar tu declaración mensual.
¿A quiénes alcanza, en términos claros?
- Vendedores de bienes y prestadores de servicios domiciliados: cuando emites un comprobante electrónico por una venta o servicio gravado, trasladas el IGV al cliente y luego lo declaras y pagas a SUNAT.
- Constructores: por contratos de construcción y por la primera venta de inmuebles que construyen.
- Importadores: el IGV se paga en aduanas al ingresar el bien al país; además, las ventas posteriores también generan IGV.
- Usuarios de servicios de no domiciliados (“utilización de servicios”): si tu empresa contrata, por ejemplo, una suscripción de software o consultoría del exterior para usarla en el Perú, tú eres el responsable de autoliquidar y pagar el IGV de esa operación.
Quiénes no resultan obligados
- Exportadores: la exportación está a tasa 0% (no cobras IGV), aunque tus compras relacionadas sí pueden generar crédito fiscal y acceso al Saldo a Favor del Exportador.
- Operaciones exoneradas o inafectas: si una ley las excluye (p. ej., ciertos alimentos, libros, servicios específicos), no cobras ni declaras IGV por esas operaciones.
- Pequeños contribuyentes del NRUS: en el Nuevo RUS no se declara IGV (se paga una cuota única mensual que reemplaza IGV e Impuesto a la Renta).
¿Cómo se calcula el IGV?
1) Cuando el precio es sin IGV
Si tienes un precio base solo agrégale el 18% para obtener el total. Por ejemplo, con una base de S/ 100, el IGV es S/ 18 y cobras S/ 118; con una base de S/ 1,000, el IGV es S/ 180 y cobras S/ 1,180.
2) Cuando el precio ya incluye IGV
Si el total ya tiene IGV y quieres conocer la base, divide ese total entre 1.18 y la diferencia será el IGV. Por ejemplo, de S/ 590, la base es S/ 500 y el IGV S/ 90; de S/ 1,180, la base es S/ 1,000 y el IGV S/ 180.
3) Determinar el IGV mensual a pagar
Calcula el IGV a pagar restando el IGV de tus compras al IGV de tus ventas. Por ejemplo, si en el mes cobraste IGV por S/ 540 y pagaste IGV en compras por S/ 200, te corresponde pagar S/ 340.
Ahora que entiendes cómo funciona el IGV —quienes están obligados y cómo se calcula— es un buen momento para ordenar tus comprobantes, revisar tus registros y asegurar una declaración sin contratiempos. Con un proceso claro, podrás declarar a tiempo y evitar contratiempos en cada periodo.